07/03/2022 | Miriam Bello

Revenue y filosofía

Séneca decía que “No hay nadie menos afortunado que aquel a quien la adversidad olvida, pues nunca tiene oportunidad de ponerse a prueba”

La filosofía es el alimento para la curiosidad de la raza humana. Permite analizar y reflexionar sobre lo que nos rodea y profundizar en conocimientos desde un punto de vista objetivo.

Revenue y filosofía

Se puede considerar como la madre del pensamiento científico. Conduce al cuestionamiento del mundo para así poder entenderlo y establecer nuevos objetivos con el propósito de mejorarlo.

Ante un suceso inesperado los seres humanos caemos en el lamento y echamos mano de la queja. De esta manera lanzamos la responsabilidad fuera ya que es más fácil desviar la responsabilidad hacia alguien o algo externo que reconocer y asumir nuestra propia debilidad.

Ortega y Gasset diría que “Hemos perdido el sentido de la perspectiva” provocando con ello que durante los dos últimos años se haya sedimentado cierto poso de desánimo provocado por las crisis económicas, las huelgas de controladores, la erupción del volcán islandés, la inestabilidad política o la COVID-19.

Algo que ha caracterizado al sector hotelero en los últimos tiempos es la resiliencia, esa capacidad de superar las adversidades a las que nos enfrentamos asiduamente. Y cuando parecía que veíamos los ansiados brotes verdes, nuestras alarmas se reactivan con el revés del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania.

Uno de los pilares fundamentales del Revenue Management es la toma de decisiones. Cuando vamos a tomar una decisión, ésta se encuentra enclavada en distintos contextos y saber interpretar ese contexto es esencial para que el pensamiento evolucione.

Algo que me hace recordar la Teoría del caos, que en términos generales, estudia la sensibilidad de algunos sistemas, en los que un pequeño cambio, puede generar grandes consecuencias. Es la ciencia del proceso, el intento del conocimiento de lo que va a suceder, no de lo que es o de lo que permanecerá. Esa famosa bolita de cristal que todo Revenue Manager lleva en el bolsillo.

¿Cuándo crees que volverán a viajar los americanos? ¿Cómo ves la primavera del 2022?

Con el caos aparece la idea de la no linealidad y, en general, se establece la enorme dificultad de predecir la evolución de determinados sistemas.El ser humano por norma general es intolerante a la incertidumbre.

En materia de Revenue, para tomar decisiones acertadas tenemos que tener en cuenta, como mínimo, estos dos factores: las circunstancias y el contexto en el que vivimos.

Uno de los filósofos griegos, el estoico Epicteto, decía que debemos plantearnos qué cosas dependen de nosotros y qué cosas no dependen de nosotros. Debemos eliminar aquello que no podemos controlar y focalizarnos en nuestra esfera de control con la intención de mejorar lo que se pueda mejorar.

Algo que depende de nosotros mismos son nuestras decisiones y por lo tanto debemos responsabilizarnos no sólo de lo que decimos y hacemos sino dónde lo hacemos y hacia quién van dirigidas nuestras opiniones. Si lanzamos una acción comercial enfocada a un mercado blindado debemos ser responsables del retorno que tendremos. Si además la publicamos en redes a la vista de todos nuestros seguidores conseguiremos que se cuestionen si estamos teniendo en cuenta el contexto actual.

A qué aspiramos también debe ser algo personal e intransferible, debemos decidirlo nosotros bajo nuestras circunstancias y en nuestro contexto. Si queremos evitar caer en una profunda insatisfacción debemos evitar que las aspiraciones vengan de algo externo y las exportemos a nuestro modelo. ¿Tenemos clara cuál es la visión de nuestros establecimientos?

Dicen los estoicos que debemos ser conscientes de nuestras limitaciones, que hay que aceptarlas tal y como vienen pero primero, debemos conocer cuáles son y dejar de pensar en los obstáculos como problemas, verlos como desafíos y reunir los recursos internos y externos para hacerles frente. Reconocer que nuestras instalaciones no están a la altura de nuestras aspiraciones harán que no ofrezcamos el producto adecuado según las circunstancias. No tener potentes herramientas de análisis que nos faciliten el proceso de la toma de decisión entorpecerá el resultado final.

Epicteto también decía que no podemos gustar a todos, no podemos generar la misma emoción a todo el mundo. Aplicado a nuestro universo hotelero debemos buscar que cada uno de nuestros establecimientos tenga su identidad propia y atraer con ella al cliente que se sienta cómoda con ella.

Uno de los principios que promueve la corriente filosófica estoica y que considera que no depende de nosotros mismos son las opiniones de los demás, ya sean positivas o negativas. Los demás siempre van emitir opiniones por lo que hay que tratar de darle la medida oportuna a cada una de esas opiniones. Si nos venimos arriba cuando recibimos seis comentarios seguidos en Tripadvisor con las 5 estrellas, o un 10 en booking, a la primera crítica negativa que recibamos de nuestro establecimiento también le daremos muchísima importancia.

Un estoico también consideraría que tampoco está a nuestro alcance los logros de los demás ya que éstos no dependen de nosotros. Alegrarnos por ello no ha de generar una obsesión por igualar sus logros sino que nuestras metas deben estar en torno a nuestro establecimiento.

Preocuparse significa adoptar una actitud de contracción. Prepararse, al contrario, apuesta por tomar una actitud proactiva y expansiva porque cuando todo esto pase, nos volveremos a levantar.

Desde The Net Revenue buscamos permanecer erguidos ante las adversidades y prosperar en entornos estresantes y hostiles. Nuestro lema es salir de la reactividad y tomar decisiones desde la claridad. Somos un equipo al que le gusta ponerse a prueba y asumir retos.

Miriam Bello - Senior Revenue Manager